sábado, 1 de octubre de 2016

El Alcoholismo, un virus transmitido de padres a hijos



HIJOS DE PADRES ALCOHÓLICOS




El 90% de los hombres alcohólicos sufre una herida narcisista desde la infancia, infligida por la imagen, real o percibida por el niño que luego sufrirá la adicción al alcohol, de una figura paterna autoritaria, despótica y exigente", afirma el psiquiatra Francisco Alonso-Fernández,catedrático emérito de Psiquiatría de la Universidad Complutense de Madrid.Alonso-Fernández acaba de asumir la presidencia de la Asociación Europea de Psiquiatría Social en el congreso que esta sociedad científica ha celebrado recientemente en Madrid. La herida narcisista no se produce sólo en los hombres. "En el caso de las mujeres, la herida narcisista aparece en el 60% o 70% de las alcohólicas, pero en este caso es por el hecho, siempre real, de una falta de entendimiento entre la hija y la madre", añade Alonso-Fernández,


Estos traumas de la infancia constituyen "un secreto reprimido, que sirve de núcleo para la organización de una personalidad insegura, inhibida, temerosa de los demás y privada de esperanza en el éxito". Según Alonso-Fernández, para el portador de una herida narcisista, el alcohol es el mejor bálsamo, porque le permitirá elevar su autoestima, desinhibirse y comunicarse con los demás. Y, sobre todo, descargar parte de su tensión emocional reprimida.

En su libro Los secretos del alcoholismo (ediciones Libertarias; Madrid, 1998) explica que los primeros pasos de la moderna concepción de la adicción al alcohol comenzaron a darse en el siglo XVIII; en el siglo siguiente se acuñó el término de alcoholismo y más tarde fue reconocido como enfermedad.

"El alcohol hace más daño físico, psíquico, familiar y social que todas las demás drogas juntas, y es la sustancia química adictiva que más agresividad y violencia genera en el ser humano", sostiene, rotundo. Alonso-Fernández identifica el mundo del enfermo alcohólico con "un laberinto mental, que tiene una vía de acceso atractiva, una trampa en forma de falsa promesa hacia la felicidad, y un callejón de salida tortuoso. Entre ambos extremos hay una red de sendas cubiertas por el sufrimiento, el deterioro progresivo, el riesgo de muerte precoz y las nocivas repercusiones sobre los demás".


El alcoholismo presenta numerosas y notables diferencias entre los dos sexos. De los aproximadamente tres millones de alcohólicos que hay en España, sólo 750.000 son mujeres. La razón principal es que las mujeres desarrollan una peor tolerancia al alcohol, porque en el estómago tienen menor cantidad de alcoholhidrogenasa, una enzima responsable de metabolizar esta sustancia.

Se observa que el 90% de las esposas de alcohólicos colabora activamente en el proceso de rehabilitación, en tanto que sólo el 10% de los maridos de alcohólicas acompaña a la esposa en su intento de curación. El restante 90% ha abandonado a la esposa alcohólica.


Otra diferencia es que el 25% de los hombres sufre depresión, mientras que entre las mujeres el porcentaje se eleva al 50% de las alcohólicas. Y entre los primeros, el alcoholismo es generalmente la causa de la depresión, mientras que entre las mujeres suele ser la consecuencia.
También en la vida sexual se observan diferencias. Por ejemplo, que el 90% de los hombres emprende relaciones con sus parejas cuando ya están instalados en el mundo del alcohol e incorporan este problema a la convivencia. En nueve de cada diez de estos hombres, el alcohol les produce disminución de la libido y disfunciones sexuales. En cambio, más del 60% de las mujeres inicia los excesos alcohólicos cuando ya tienen pareja, muchas veces por un conflicto sentimental, por la pérdida del compañero o la influencia directa de una pareja ya alcohólica.

Capacidad de contagio


Alonso-Fernández advierte de que el alcohol tiene capacidad de contagio, como las infecciones por virus, bacterias u otros microorganismos patógenos. El 50% de los hijos de alcohólicos recibe el legado de sus padres "por la influencia personal mimética del progenitor y por el aprendizaje alcohólico que impera en estas familias". También hay una estraña relación familiar entre el alcoholismo y la esquizofrenia: "Los esquizofrénicos tienen un padre alcohólico en el 15% o el 20% de los casos y un hermano en el 5%. La hipótesis más razonable es que el alcoholismo del padre actúa como un agente que facilita la eclosión de la esquizofrenia en la prole. Un padre adicto al alcohol no sólo es capaz de destruir la unidad familiar, sino que ejerce un efecto de tendencia a la disociación de la personalidad, que es el rasgo de origen familiar más afín a la esquizofrenia".

El anterior artículo no es de propiedad intelectual de Alcohólicos Anónimos, ni se poseen los derechos de publicación o transmisión. El contenido fue compartido de forma anónima o por la fuente en las redes sociales y fue adaptado para los propósitos informativos del blog. 

martes, 13 de septiembre de 2016

¿Soy realmente Alcohólico?

Alcohólico en Barranquilla


Hola amigos, mi nombre es Anónimo y pertenezco a la comunidad de Alcohólicos Anónimos. Soy un joven de 29 años de la ciudad de Barranquilla que ha sufrido los estragos del alcoholismo. Sí, soy un “enfermo alcohólico”; pero no te asustes, aceptar que sufro la enfermedad fue el primer paso para encaminarme en una saludable recuperación. Quizás habrás escuchado de los 12 pasos y de Alcohólicos Anónimos, o se te ha cruzado por la cabeza la idea de averiguar sobre que se trata; quizás no. Sin embargo eso no depende totalmente del grado de auto conciencia, en mi caso para llegar a la conclusión de que necesitaba ayuda fue necesario tocar fondo, o fondos en la enfermedad. Si bien vemos el alcoholismo como una enfermedad incurable no significa que debemos resignarnos a seguir siendo víctimas y victimarios de de las cosas que hacemos bajo los efectos del alcohol, lo vemos de esta manera para entender que es una condición que puede ser tratada y que nos puede devolver la calidad de vida. Actualmente soy parte de la comunidad de Alcohólicos Anónimos de Barranquilla y sigo obedientemente el programa de recuperación que ha cambiado y salvado mi vida, y quiero compartirlo con todos los lectores. 

¿Alguna vez te has preguntado el porqué no has podido dejar de beber?


Comencemos describiendo el alcoholismo como una enfermedad crónica, progresiva y silenciosa, comparada con el cáncer es igual de mortal. Sin embargo el alcoholismo puede ser detenido y salvar tu vida depende de ti mismo. No te quiero convencer de absolutamente nada, ya que existen personas como yo que no podemos controlar nuestra manera de beber y también personas como tú, que son capaces de manejar su forma de beber, tomar un par de tragos y vivir una vida completamente normal sin que eso afecte en la familia, los amigos, el trabajo y las finanzas personales. Para mi desgracia ese no fue mi caso, ya que mi persona es uno de esos bebedores compulsivos, que me encanta el alcohol y entre más cantidad mejor y beber como si no existiese un mañana era la panacea para curar mis aflicciones, pero lo que conseguí fue arruinar todo lo bello que alguna vez tuve.
El camino para la recuperación no es fácil.

Aceptar que tenemos un problema con el alcohol no es sencillo, ya que es socialmente aceptado que de vez en cuando alguien pierda el control de sus actos cuando bebe, pero se convierte en un problema si eso sucede cada vez más frecuentemente. Entonces te das cuenta que los amigos con los que solías salir siempre están ocupados para salir contigo, tu familia ya no te invita a las reuniones porque nunca te interesó antes asistir por estar bebiendo en otro lado, tus relaciones personales y sentimentales se destruyen porque no eres capaz de tomar el control sobre tu vida. En ese momento es cuando te das cuenta que algo anda mal; si no lo haces no hay problema, no está mal, como sea tarde o temprano tocarás otro fondo hasta que veas la realidad. Pero es en ese momento en que ves la realidad, cuando tienes que tomar la decisión definitiva. No será fácil, habrá obstáculos y tentaciones e incluso falsos amigos que intentaran entorpecer tu progreso. Pero de algo soy testigo y es que la entrega y una firme determinación harán posible que ese cambio valga la pena. Sin embargo nuevamente repito, no todos tenemos problemas con el alcohol, solo aquel quien se considere a si mismo fuera de control puede declararse alcohólico.

¿Cómo saber si soy alcohólico?


A continuación, una serie de preguntas que le ayudarán a determinar si tiene usted problemas con el alcohol o no. Responda lo más honestamente posible con un “Sí” o “No”. Recuerde de su honestidad depende el resultado de esta prueba. Si es posible enumere cuantas respuestas afirmativas y negativas ha contestado.

1)¿Ha tratado alguna vez de no beber por una semana (o más), sin haber logrado cumplir el plazo?

2)¿Le molestan los consejos de otras personas que han tratado de convencerlo 
que deje de beber?

3)¿Ha tratado alguna vez de controlarse, cambiando de una clase de bebida a otra?

4)¿Ha bebido alguna vez por la mañana durante el último año?

5)¿Siente envidia de las personas que pueden beber sin que eso les cause 
dificultades?

6)¿Ha empeorado progresivamente su problema con la bebida 
durante el último año?

7)¿Su forma de beber le ha causado problemas en su hogar?

8)¿En reuniones sociales donde la bebida es controlada, trata usted de 
conseguir tragos extra?

9)¿A pesar de ser evidente que no puede controlarse, ha continuado usted 
afirmando que puede dejar de beber por si solo cuando usted quiera?

10)¿Ha faltado a su trabajo durante el último año a causa de la bebida?

11)¿Ha tenido alguna vez LAGUNAS MENTALES a causa de la bebida?

12)¿Ha pensado alguna vez que podría tener más éxito en la vida si no bebiera?

Cualquier persona que conteste “Sí” a cuatro o más de estas 12 preguntas, tiene tendencias alcohólicas definidas.

Si el resultado de la prueba le dejó un sin sabor, recuerde amigo que no es una vergüenza admitir que se padece de una enfermedad. Si realmente usted tiene problemas con la bebida, lo más importante es hacer algo para solucionarlo.



El grupo EL MENSAJE, de Alcohólicos Anónimos es una comunidad de hombres y mujeres que comparten su mutua experiencia, fortaleza y esperanza, para resolver su problema común y ayudar a otros a recuperarse del alcoholismo.


 Si usted considera que no es alcohólico pero que uno de sus familiares o amigos puede serlo, entonces pase el mensaje, de eso depende la vida de esa persona.

Puede visitarnos desde las 7:30 p.m. de lunes a viernes en el barrio Paraíso en la ciudad de Barranquilla en la dirección Cra 68 # 80, a la vuelta de la Veloz